La pasión de Brel

Hace algunos días el cantante español Julio Iglesias reconoció que, si bien grabó un disco de tango lo canta mal, aunque de todas maneras el hecho de poner “pasión” a la música salva este tipo de interpretaciones.

Ante estas declaraciones me surgen dos precisiones: la primera es que difícilmente alguien que no es del Río de la Plata logre interpretar correctamente el sentir del tango, así como nosotros no llegamos a hacerlo con el flamenco o las sevillanas; pero sí quiebro una lanza por la pasión que ponen algunos artistas a la hora de interpretar... claro que no me refiero a Julio Iglesias.

Seguramente nadie como el cantante franco – belga Jacques Brel a la hora de poner el sentimiento y la vida en manos de sus canciones.

“Le grand Jacques” nació al norte de Bruselas en 1929, pero su vida artística la desarrolló íntegramente en Francia, en donde falleció, el 9 de octubre de 1978. Sus restos descansan junto a los de Paul Gauguin en las Islas Marquesas.

Nada mejor para recordar a Brel que su interpretación de Le Moribond, uno de sus grandes temas.

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